Bloque 3: Escritura


La escritura es el proceso por el que se pasa de la posesión interna de un concepto, idea o pensamiento a la transformación de ese concepto, idea o pensamiento mediante una codificación de símbolos gráficos, con intención comunicativa.
Por tanto, al igual que la lectura, la escritura es un acto de comunicación con el entorno y las personas que nos rodean. Aprender a escribir es aprender a comunicarnos y utilizar la lengua en diferentes situaciones, por lo que el colegio debe proponer opciones comunicativas por escrito suficientemente variadas, facilitando así un amplio abanico de posibilidades de aprendizaje para el alumnado.
La grafomotricidad es el control motor asociado a la grafía, que implica direccionalidad, tono muscular, coordinación visomotora y ubicación espacial. Por lo tanto, la caligrafía es una proyección de la grafomotricidad, ya que una vez los niños son capaces de trazar todos los grafemas de forma adecuada, la escritura debe seguir trabajándose, para que esta sea legible y clara.
En todas las clases nos vamos a encontrar alumnado con algún tipo de retraso, en este caso vamos a analizar cómo trabajar con un niño de 2º de primaria que tiene un retraso escritor y, por ello, necesitamos hacer que mejore la competencia caligráfica.
Es importante que la letra de los niños sea legible, limpia y clara. Para ello, ciertas actividades de modelado, es decir, copiado de textos, harán que mejore la escritura manuscrita. Estas, se deberá plantear con algún tipo de propósito para que el alumnado se sienta motivado en el aprendizaje. Es aconsejable trabajarlo como rutina y poco a poco ir aumentando la dificultad.

ESTRATEGIAS DE MOTIVACIÓN
Se trata de un niño de 7-8 años con dificultades en la escritura, una grafía en desarrollo con un retraso en comparación con el resto de sus compañeros/as. El objetivo no es presionarle a hacerlo “perfecto”; al contrario, con esta propuesta pretendemos darle las herramientas necesarias para mejorar su trazado manteniendo la motivación en ello.
Podemos acercarnos a esta edad haciéndoles ver la funcionalidad que tiene la escritura. Propongo pues, enseñarles la inmensidad de textos que nos encontramos día a día y hacer que presten atención a la importancia que tiene saberlos escribir adecuadamente.
Podemos empezar a trabajar con este niño desde lo más básico y cercano para él, como es su nombre y la fecha. Sin embargo, poco a poco, iremos trabajando diferentes aspectos de la vida cotidiana y ampliando las oraciones o textos, en longitud y en dificultad. No debemos dejar de lado la importancia de la legibilidad, la limpieza y el orden, para poder comunicarnos adecuadamente con otras personas, sin que haga falta la “traducción” del texto.

TIPO DE MATERIALES
Los materiales que utilizará nuestro alumno serán:
  • Plantilla, escrita previamente por la profesora con su nombre completo y la fecha del día. Cada trimestre se le puede ir preguntando al niño o prestando atención a sus temas de conversación, para conocer temas de su interés e ir haciendo más plantillas con, primero, palabras, y más adelante oraciones relacionadas con sus intereses, para facilitar la motivación con la tarea. Al cambiar de trimestre se elaborarán plantillas nuevas en relación al tema elegido. Se ofrecerá al niño, una caligrafía acorde al nivel de escritura aprendido. Se empezará trabajando con letra escolar enlazada.
  • Hojas de grafía con líneas y espaciado determinado, facilitando la escritura siguiendo la línea y dejando los espacios necesarios para que quede una escritura clara y limpia. Por ejemplo, haciendo uso de los cuadernos Lamela, además así tendrá en un mismo cuaderno su trabajo y podrá ver su evolución.

Cuaderno Lamela

  • Lápiz, goma de borrar y sacapuntas. Siendo un lápiz blando del número 2 para facilitar la escritura al alumno/a sin necesidad de realizar mucha presión.
  • Rotuladores, para poder variar de útil de escritura y así observar también la presión y fuerza que ejerce al escribir. Siendo un sistema autocorrectivo. 

PROCESO DE TRABAJO
Como ya hemos dicho antes, es importante una rutina para que podamos ver el progreso de forma cada vez más rápida, aunque sin olvidarnos del ritmo de nuestro niño. Le propondremos la actividad, no como castigo, sino como ayuda para que mejorar su letra y con ello la funcionalidad que supone; es decir, que sea legible para los demás.
Durante las primeras sesiones, es importante que nuestro alumno se sienta motivado y que vea su progreso de manera clara, para que así quiera continuar con el proceso. Como ya he comentado, empezaremos por lo más básico, su nombre y la fecha. Poco a poco iremos introduciendo nuevas palabras y oraciones. La fecha y el nombre es algo que trabajarán todos los compañeros de la clase, sólo que este niño en particular lo realizará a través del modelado en su cuaderno.
Se debe hablar con el niño/a para hacerle consciente de la importancia de trabajar y esforzarse por mejorar aquello que le es difícil. La actividad se podrá reforzar en casa, ya que algunas palabras u oraciones que vayamos añadiendo las realizará en casa. Es importante dejarle claro que no debe de utilizar más de 10 minutos al día, así conseguiremos que se vea motivado por el trabajo y consiga ver su progreso sin caer en el aburrimiento.
Cuando tengamos las diferentes plantillas terminadas, podrá leerlas y repasarlas fijándose si tiene que mejorar alguna de ellas antes de que termine el trimestre.

EVALUACIÓN
El proceso de escritura es muy lento, por ello debemos tener paciencia. Aunque vamos a poder ver cambios en la técnica y la forma de escribir, no solo nos fijaremos en el resultado del copiado, sino en su postura, en su manera de coger el lápiz, la posición de la hoja, la claridad o la limpieza.
La manera de evaluar al alumno sería mediante observación, viendo si va cumpliendo y superando ciertos ítems de manera progresiva. No se trata de evaluarle y añadirle presión con conseguido/no conseguido, sino ver qué aspectos necesita reforzar y qué otros podemos considerar como desarrollados.
Al ser una actividad diaria podemos comparar diferentes plantillas y observar su progreso. En caso de ir avanzando y mejorando, se podrán ir complicando las copias con frases más largas motivándole a escribir más. Por el contrario, si vemos que no avanza, se frustra con la caligrafía, deberemos facilitárselo eligiendo nosotros mismos otra, que le vaya a ser más fácil para coger confianza con su capacidad escrita.

Ítems a observar por el maestro/a:

ITEMS
No
A veces
OBSERVACIONES
Mantiene una postura adecuada al realizar el copiado.



Coge el lápiz de manera adecuada



Realiza una presión adecuada a la hora de escribir



Inclina el papel para facilitarle la escritura



Escribe sobre la línea de la pauta



Copia las letras correctamente, diferenciando mayúsculas y minúsculas



Realiza de manera correcta la grafía de las letras (dirección del trazo)



Deja un espacio adecuado entre las letras y palabras copiadas



Copia un tamaño de letra proporcionado



Realiza un trabajo claro y limpio




A su vez, para que él mismo sea partícipe de sus aprendizaje, se podría entregar una hoja de autoevaluación al alumno para ayudarle a ser consciente de aquellos ítems a mejorar y/o a potenciar.

ITEMS
Si
No
A veces
Tengo una buena postura al escribir
Cojo bien el lápiz
No aprieto al escribir
Giro la hoja para que me sea más fácil escribir
Dejo espacio entre las palabras para que se entienda bien
Mi trabajo es limpio y claro

BIBLIOGRAFÍA
Labajo, I. (2019). Didáctica de la lengua española.





















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